indicadores clave para la mejora de la cadena de suministro.
La planificación de la cadena de suministro (CdS) es un proceso fundamental sobre el que se asientan la mayoría de las operaciones clave de cualquier compañía. Y como sabemos, hablar de «proceso» cuando aludimos a la planificación CdS y entenderla como tal, es decir, como algo perfectible, no cerrado, sujeto a continuas revisiones y evaluaciones es tan o más crucial que la planificación en sí misma.
La planificación CdS, pues, no solo incluye el diseño y la puesta en marcha de la cadena de suministro, sino también su supervisión y la monitorización del desempeño de los procesos y las actividades clave que tienen lugar en cada una de sus fases, por lo que contar con medidores de rendimiento que permitan evaluarlos adecuadamente es absolutamente imprescindible para lograr una mejora continuada y sostenida a lo largo del tiempo.
Tipos de medidores para la mejora de la cadena de suministro
Cada proceso o actividad implicada en la cadena de suministro debe ser correctamente monitorizada, por lo que es necesario seleccionar y establecer los medidores concretos oportunos que permitan, de un solo vistazo, evaluar su desempeño. Pero más allá de estos indicadores, que a menudo aquejan una aparentemente insalvable desconexión entre sí, existen otros indicadores que ponen en relación todos y cada uno de los eslabones de la cadena de suministro procurando que se cumplan los objetivos estratégicos establecidos.
Estos medidores son los que, en primera instancia, permiten una mejora sostenida de la cadena de suministro, y los que consiguientemente deben figurar en cualquier planificación CdS que observe esta mejora como una de sus metas principales. Para simplificar la cuestión, podemos reunir estos indicadores clave de rendimiento o desempeño en 3 grandes tipos (extrapolados de los principales indicadores financieros), establecidos según su función:
Medidores predictivos o leading: como su nombre indica, se trata de indicadores orientados a la predicción, con el fin de anticipar posibles disfunciones, irregularidades u otros percances en el correcto desempeño de la cadena de suministro. Desviaciones en los procesos, paros de la línea de producción, mermas en la calidad de las materias primas, los servicios o los bienes producidos… todos aquellos indicadores que permiten valorar los posibles escenarios (en un sentido positivo o negativo) que podría afrontar la organización, permitiendo una mayor anticipación, una toma de decisiones más acertada e inmediata, y un mayor aprovechamiento de las nuevas oportunidades de negocio.
Medidores históricos o lagging: indispensables para obtener un conocimiento real del estado de la compañía, y de los procesos y las actividades clave implicados en el desempeño de la cadena de suministro.
Medidores de coincidencia: son los que ofrecen una visión en tiempo real del desempeño de la cadena de suministro, en relación con el estado del mercado, la demanda y la capacidad de respuesta de la compañía.
No cabe duda de que, en la planificación CdS, el desarrollo de las nuevas tecnologías ha ejercido una poderosa influencia, transformando casi por completo la escena de la gestión empresarial. Por ello, disponer de información y conocimientos adecuados sobre la cuestión es determinante a la hora de lograr una mejora sostenida de la cadena de suministro, un asunto que recursos como la guía El e-commerce y la nueva cadena de suministro, disponible completamente gratis, exponen con sumo detalle y claridad.
Indicadores de gestión para la cadena de suministro
El proceso de medición de los resultados de la cadena de suministro ha evolucionado desde mediados de los años ochenta. Fue entonces cuando pasó a ser integrado en el enfoque táctico y estratégico de las organizaciones, en base a métricas obtenidas de distintos indicadores de gestión. Desde entonces, se han desarrollado varios modelos de estructuras de medición del desempeño que permiten recoger este tipo de datos.
Existen varios indicadores de gestión que pueden aplicarse a la hora de medir el desempeño del supply chain aunque, casi siempre, se organizan en torno a tres pilares principales:
Servicios.
Actividades.
Velocidad.
No obstante, entrando en materias específicas, es frecuente recurrir aindicadores de gestión que proporcionan visión sobre el desempeño financiero y económico de la cadena de suministro de extremo a extremo. En cualquier caso, los mejores resultados se obtienen cuando la definición y el establecimiento de estos indicadores se lleva a cabo teniendo en cuenta la particularidad y especificidad de cada sistema a medir.
Ejemplos de indicadores de gestión para la cadena de suministro
Un compendio bastante completo de indicadores de gestión para el supply chain puede encontrarse en el libro “Un enfoque integrado BSC-AHP para la evaluación de la gestión de la cadena de suministro” de Milind Kumar y Rajat Bhagwat. Los autores, desde su conocimiento de la materia, proponen los siguientes:
A/ Finanzas
Retorno de la inversión (ROI).
Ajuste con el presupuesto.
Grado de colaboración entre empresa y proveedor.
Costo de operación por hora.
Información sobre la gestión de costes.
Tasa de rechazo de cada proveedor.
B/ Clientes:
Percepción de valor del producto recibido por el cliente.
Gama de productos y servicios.
Tiempo de entrega del pedido.
Flexibilidad del servicio específico al cliente.
Eficiencia en la entrega de la factura.
Fiabilidad de los envíos.
Capacidad de respuesta en las entregas urgentes.
Información sobre la gestión de costes.
Calidad de la documentación de entrega.
Calidad de los productos entregados.
Entregas con cero defectos.
C/ Procesos.
Tiempo de ciclo total de la cadena de suministro.
Tiempo de entrega del proveedor frente al estándar de la industria.
Tasa de entregas del proveedor con cero defectos.
Precisión de las técnicas de predicción.
Tiempo del ciclo de desarrollo de productos.
Tiempo de ciclo de los pedidos.
Costo total del inventario
Costo de inventario de materias primas e insumos.
Costo de inventario de productos en tránsito.
Costo de inventario de productos terminados.
Costo de los residuos.
Porcentaje de las compras retornadas.
D/ Desarrollo interno:
Capacidad de respuesta a los problemas técnicos.
Iniciativas viables para la reducción de costes.
Procedimientos de reserva de proveedores.
Métodos de entrada de pedidos.
Precisión de las técnicas de predicción.
Tiempo del ciclo de desarrollo de productos.
Indicadores de gestión, firme apoyo
La complejidad de las cadenas de suministro va en aumento, como también se incrementa la dificultad de gestionarlas. Más productos, mejores servicios, mayor personalización y, todo ello, a una velocidad sin precedentes. La globalización es un hecho y ello afecta a la capacidad de control que, se puede ver mejorada si:
Se establece la coordinación necesaria con los sistemas de tecnología de la información.
Se busca la integración entre los diferentes elementos que conforman la cadena.
Se implementan métodos orientados a la mejora continua.
Los tres puntos anteriores requieren de datos objetivos y fiables para hacerse realidad y éstos sólo pueden provenir de los indicadores de gestión que, con las métricas que proporcionan hacen posible generar sinergias, minimizar el riesgo y mejorar los resultados generales.
Los mejores KPIs. Ejemplos para la monitorización del supply chain
Los indicadores de mejora de la cadena de suministro son el único medio de tomar el pulso a su rendimiento. Algunos de los kpis de los ejemplos que se proponen a continuación, son muestra de que, prácticamente cualquiera de las acciones que se desarrollan a lo largo y ancho del supply chain, de extremo a extremo, son susceptibles de medición.
KPI – Key performance indicator
La recogida de métricas procedentes de loskpis de los ejemplos facilitan la adquisición de una visión global sobre el negocio. Esta visibilidad se caracteriza por:
Basarse en indicadores relevantes y eficaces en la medición del desempeño.
Estar revestida de objetividad, la base para una toma de decisiones de precisión.
Facilitar el progreso hacia los objetivos estratégicos.
Además de una correcta selección de kpis, los ejemplos que se aportan en el próximo apartado ilustran sobre los que mayor utilidad implican; es necesario que el proceso de implementación de estos indicadores se lleve a cabo de la manera adecuada. Esto incluye:
1. Orientación sobre los requisitos de los sistemas de presentación de informes.
2. Elaboración bien documentada de las definiciones de los kpi.
3. Planificación de los procesos de gestión del cambio.
4. Plan de contingencia para apoyar la resolución de los problemas derivados de la gestión del rendimiento.
KPIs ejemplos aplicables a la cadena de suministro y su gestión
Medir el progreso hacia la estrategia de negocio y proporcionar visibilidad a todos los niveles de la empresa en cuanto a su contribución a las metas globales es la función de los indicadores de rendimiento. Como es el caso de los kpis de los ejemplos siguientes:
A/ Kpis ejemplos de gestión de compras y proveedores:
Número de proveedores gestionado.
Entregas de proveedor a tiempo.
Rechazos de proveedor.
Gastos de compra (entendidos como porcentaje de las ventas brutas).
B/ Kpis ejemplos de gestión de inventario y forecasting:
Número de SKU / Elementos de línea.
Stock de productos terminados.
Stock de materias primas.
Nivel de precisión en el catálogo.
Obsolescencia de inventario.
Costes de gestión de inventario (entendidos como porcentaje de las ventas brutas).
Costes de mantenimiento de inventario (entendidos como porcentaje de las ventas brutas o del valor total de inventario).
Valor promedio de inventario.
C/ Kpis ejemplos de almacenamiento:
Tasa de precisión en la preparación de pedidos.
Número de artículos de inventario ubicados incorrectamente.
Número de veces en que un producto es manipulado.
D/ Kpis ejemplos de transporte:
Número de pedidos despachados por día.
Frecuencia de salida de camiones con carga completa.
Número de entregas a tiempo.
E/ Kpis ejemplos de servicio al cliente:
Número de clientes.
Número de órdenes de pedido gestionadas por día.
Tasa de clientes perdidos.
Tasa de devolución de productos.
Número de entregas a cliente a tiempo.
Porcentaje de productos dañados.
Tasa de exactitud de factura.
Formas de pago empleadas.
Coste del servicio al cliente (entendido como porcentaje de las ventas brutas).
Indicadores de calidad en la gestión logística y el transporte
La gestión de la calidad es un aspecto absolutamente crucial en la planificación y la gestión de la cadena de suministro, aunque su concepto no siempre cuente con una comprensión lo suficientemente ajustada a lo que realmente representa.
Con demasiada frecuencia, la gestión de la calidad se interpreta como la planificación y la observación de un conjunto de medidas destinadas a ofrecer productos o servicios de acuerdo con unos determinados estándares de calidad, establecidos de un modo unilateral por los responsables de la compañía. Sin embargo, la realidad es mucho menos relativa y ambigua y, como veremos enseguida, la jurisdicción de la gestión de la calidad traspasa con creces los límites de la mera producción o la prestación de determinados servicios, algo que condiciona de un modo determinante la selección de los indicadores de calidad más adecuados.
Indicadores de calidad: una visión integral de la cadena de suministro
Los indicadores de calidad, como decíamos, se reducen con demasiada frecuencia a evaluar la calidad del producto final o el servicio prestado en función de los estándares establecidos en el manual de calidad de una compañía, la herramienta principal que determina la selección de los indicadores más adecuados para cada caso.
Es, pues, en el manual de calidad donde radica el fundamento para la adopción de una política de calidad adecuada, un manual que en su elaboración debería primar la consideración de los estándares definidos por las agencias internacionales y no otro tipo de criterios particulares. Como hemos visto en anteriores ocasiones, la observación de la norma ISO 9001 es, en estos casos, imprescindible, una norma que obliga a considerar el conjunto de operaciones, procesos y actividades implicadas en la cadena de suministro de un modo integral.
Si tenemos en cuenta que el objetivo último de cualquier modelo de gestión de calidad es incrementar el nivel de satisfacción del cliente, cualquier eslabón de la cadena cobra una importancia más que relevante para obtener un resultado final óptimo. Y en el caso de las compañías especializadas en logística y transporte, esto deviene especialmente transcendental.
Desde la planificación hasta la recepción de la mercancía por parte del cliente, e incluyendo por supuesto las operaciones de logística inversa que se lleven a cabo, todos y cada uno de los procesos y las actividades implicadas en la prestación del servicio desempeñan un papel crucial a la hora de cumplir con unos estándares de calidad objetivos. Por este motivo, y a modo de ejemplo, podemos enumerar algunos de los indicadores de calidad ineludibles que deben figurar en todo cuadro de mando destinado a la monitorización de operaciones logísticas y de transporte:
Relación costes-beneficios: la reducción de costes o la búsqueda de mayores beneficios no debe, en ningún caso, repercutir en los niveles de calidad exigibles. Por ello, los indicadores de calidad seleccionados para este fin deben poner en relación estos aspectos, procurando fijar unos mínimos de calidad inquebrantables y obligando a buscar modos alternativos de reducir costes y ampliar márgenes de beneficio que no afecten a la prestación de un servicio de calidad.
Tiempos: la reducción del tiempo en la gestión, la carga y la distribución de mercancías redunda indefectiblemente en la mejora de la calidad del servicio, por lo que este ítem debe contar con los indicadores oportunos en el conjunto de los KPI de calidad que se implementen.
Nivel de satisfacción del cliente: es imprescindible contar con indicadores que permitan medir de un modo objetivo el grado de satisfacción del cliente con el servicio prestado. En este asunto entran en juego tanto indicadores de tipo cuantitativo (número de quejas recibidas, atenciones prestadas por parte del servicio de atención al cliente…) como indicadores cualitativos (observaciones del cliente, comentarios recibidos a través de distintos canales…).
Operaciones de logística inversa: estas operaciones deben contar con indicadores específicos que evalúen aspectos como los tiempos de recogida y devolución de mercancías al punto de origen, costes repercutidos al cliente, márgenes de beneficios-pérdidas, impacto medioambiental de estas operaciones…