Metodología Agile: conoce aquí cómo aplicarla en gestión humana
Agile es una forma de realizar el trabajo centrada en el talento humano que mejora la productividad. Con la metodología agile las herramientas y los procesos se adaptan a las personas. Esto hace que en el entorno de trabajo haya más flexibilidad y su vez sea más productivo. ¿Alguna vez te has sentido atado de manos ante la rigidez de un proyecto o contrato? Esto suele ocurrir con frecuencia. En otras oportunidades ocurre que mientras desarrollamos un proyecto ocurren cambios en el contexto que hacen que pierda su vigencia, sin que haya oportunidad de corregir el rumbo.
En la metodología Agile, el producto final de un proyecto es el resultado de la interacción entre las partes: Agile promueve el contacto directo y permanente entre clientes y el equipo de trabajo. El producto final es el resultado de esa interacción. Otros principios de esta forma de trabajo son: el talento humano es el principal activo, la anticipación y la adaptación como estrategia de productividad.
La metodología Agile fue la respuesta que encontraron en el año 2001 los expertos del mundo del software, ante la llamada crisis del desarrollo de las aplicaciones. De acuerdo con Randstad (2018), el 35 % de las empresas usan métodos agiles.
¿En qué consiste la metodología Agile?
Los profesionales que aplican la metodología Agile comparten el principio de entrega de valor en periodos cortos. Para ello, promueven la desagregación de los proyectos, las entregas de avances, la mejora continua. No hay cabida para proyectos rígidos con entregas finales.
Los trabajos son realizados por equipos multidisciplinarios, autónomos, por lo general, no mayores a ocho personas. Al trabajar en ciclos cortos sobre
pequeñas partes (sprints) los equipos se hacen más dinámicos. Esto facilita el diagnóstico, la toma de decisiones e incrementa la productividad
¿Cuáles son los beneficios de la metodología Agile?
La metodología Agile propone una nueva forma de afrontar los desafíos del desarrollo organizacional, lo que supone varias ventajas:
- Una mejor experiencia para los actores del proyecto: los miembros del equipo, usuarios y clientes interactúan y aportan su visión durante todo el trabajo. Esta práctica evita la falta de correspondencia entre los resultados esperados y el producto final.
- Mejora la productividad y la calidad: como se trabaja en ciclos cortos con pequeñas tareas se facilita la identificación y la corrección de los errores. La participación de un equipo multidisciplinario enriquece un proceso de mejora continua. Al final, el producto que se logra tiene la calidad requerida.
- Mayor compromiso: la capacidad de autogestión y el espíritu colaborativo de un ambiente ágil aumentan el compromiso del equipo. Se crea un entorno dinámico positivo que estimula la creatividad y el rendimiento de sus participantes.
Paso a paso para implementar la metodología agile en recursos humanos
1. Rediseñar los procesos y construir equipos ágiles
Para implementar los principios de la agilidad es necesario transformar la forma tradicional de organizar el trabajo. Recursos humanos puede utilizar estos principios para rediseñarse a sí misma y mejorar sus procesos. Una forma de hacerlo es creando equipos de trabajo.
Los profesionales de recursos humanos se pueden organizar en equipos de trabajos pequeños y multifuncionales para atender los distintos proyectos. Esta visión le dará un gran ritmo a las actividades diarias a la vez que fomentara la colaboración y el aprendizaje. Pueden existir tantos equipos como objetivos estratégicos. La idea es que cada equipo ágil tenga la suficiente autonomía para resolver los desafíos y alcanzar las metas.
2. Entregar servicios ágiles
Recursos humanos debe entregar servicios tanto a la directiva de la empresa como a los empleados. Estos servicios deben responder a una construcción conjunta con las partes involucradas. De tal forma, que el producto o servicio final sea relevante para los empleados o la alta dirección. En el marco de la agilidad, de nada sirven las soluciones construidas en una oficina a puertas cerradas.
Si se trata de planes de beneficios para los empleados, las alternativas adoptadas deben construirse en consenso con los trabajadores. En el caso de reclutamiento, debe participar los líderes donde estén las vacantes. Esto significa, estar dispuesto a escuchar los comentarios y argumento de todas las partes y hacer los ajustes cuando sea necesario.
3. Gestión del rendimiento
Los programas de iniciación o de transición de una competencia a otra son experiencias que afectan el rendimiento de los empleados. Sobre todo afecta aquellos que tienen una motivación distinta a lo funcional o retribución monetaria. Se necesita diseñar estos programas de manera iterativa y en colaboración con los líderes de los departamentos o procesos.
Pero en vez de esperar largos periodos de tiempo mientras se desarrolla el proyecto, en el marco de la agilidad se someten a la experiencia los avances y se reciben los comentarios para hacer los ajustes necesarios.
Los principios de la agilidad son simples pero implementar una cultura ágil dentro de una organización requiere un trabajo constante y, sobre todo, del talento humano dispuesto a hacerlo. Nuestra Agencia de Empleo Colsubsidio te puede ayudar a identificar las habilidades blandas que un candidato necesita para adaptarse y apoyar esta metodología en tu empresa.