Desgraciadamente, los resultados negativos de la prevención de riesgos (o de su ausencia), son mucho más notables: Los accidentes/enfermedades profesionales. Esto sí tiene consecuencias visibles, tanto para la Dirección de la empresa como para todos los empleados y sus familias:

En cambio, si en la empresa hay una cultura preventiva sólida, los procesos están bien diseñados desde el punto de vista de la seguridad, la linea de mandose implica de forma proactiva y los empleados realizan su trabajo basándose en comportamientos seguros, disminuiremos la probabilidad de éstos ocurran. Es la invisibilidad de la gestión preventiva. Pero esto no significa que los resultados sean tan evidentes. Simplemente notamos que todo “discurre con normalidad”.

En general, no percibimos que el esfuerzo que hacemos en trabajar de forma segura tenga una recompensa inmediata y palpable. Veamos un ejemplo:

Poco antes de acabar el turno de trabajo y terminar la última de las piezas que tiene que ensamblar, Luis ve cómo el equipo con el que trabaja se queda atascado. Solo le quedaban 10 minutos de trabajo para terminar la pieza. Conoce muy bien el protocolo que tiene que seguir:

  1. Parar la máquina y consignarla.
  2. Avisar a su compañero de mantenimiento, que deberá utilizar una plataforma para acceder a la pieza atascada.
  3. El equipo de mantenimiento extrae la pieza y revisa que todo esté en correcto estado de funcionamiento.
  4. Rearmar la máquina
  5. Puesta en marcha.

La pieza debe quedar hoy terminada, así que tardará una hora más de lo previsto en terminar el trabajo planificado para esa jornada. Eso sin contar que al día siguiente debe elaborar un informe en el que detalle el incidente ocurrido y analice las posibles causas. 

Por otro lado, conoce bien la máquina y sabe cómo acceder a la pieza y desatascarla él mismo, sin necesidad de seguir el protocolo. En 5 minutos, la máquina estará operativa de nuevo y cumplirá sus objetivos de producción sin problema.

Analicemos la situación. En la balanza, dos tipos de resultados. La clave está en las consecuencias “Seguras e Inmediatas”, esas son las que tendrán más peso en la elección del empleado. Las consecuencias seguras e inmediatas de la opción insegura son positivas, mientras que las de la opción segura son negativas. 

¿Qué pesa más?

Opción Insegura Opción Segura
Cumplir objetivos de producción – Seguro e inmediato Terminar una hora más tarde – Seguro e inmediato
Terminar a tiempo – Seguro e inmediato No cumplir los objetivos de tiempos de producción – Seguro e inmediato
Tener un accidente – Posibilidad remota Elaborar el informe – Seguro e inmediato

Ahora veamos la repercusión de ambas opciones:

  • Opción insegura: El empleado tiene un accidente grave, pues la máquina se pone en marcha mientras él está actuando sobre ella.
    • Se activa el protocolo de emergencia, con asistencia de los servicios médicos municipales.
    • El empleado es hospitalizado.
    • La línea de producción queda fuera de uso durante un mes.
  • Opción segura: Se actúa según protocolo y se finaliza el trabajo según lo previsto. Se reporta el incidente y se justifica así el incumplimiento de los tiempos de producción.

Es evidente cuál de las dos opciones es más visible. La falta de seguridad es más notoria, mientras que la actuación segura se considera la “normalidad”.

Precisamente ahí es donde tenemos que poner nuestro foco. Poner en valor que lo realmente importante en cuanto a prevención de riesgos laborales es que la jornada laboral se desarrolle con normalidad para todos los empleados y demás personas que realizan su actividad en nuestros centros de trabajo.

Que se actúe tomando siempre la opción segura de forma natural, sin que las personas perciban que están “haciendo prevención de riesgos”, si no que están haciendo su trabajo de forma correcta. De esta forma las “opciones inseguras” no ser una opción.

Los departamentos de prevención de riesgos laborales no queremos notoriedad, nuestro logro está en “parecer invisibles pero estar en todas partes”, mientras hacemos que la prevención esté presente en cada proceso y cada toma de decisiones, a nivel técnico, organizativo y personal. Que la prevención de riesgos se integre como parte de todos los departamentos y forme parte del lenguaje corporativo de cada organización.

PRL y la organización invisible

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